A la hora de elegir mascarillas quirúrgicas hay que tener en cuenta varios criterios, como la aplicación, el tipo de mascarilla, el nivel de protección requerido, etc.
- La aplicación: en función de la profesión, el campo de aplicación y la presencia o ausencia de enfermedades contagiosas, los pacientes y cuidadores utilizan un determinado tipo de mascarilla con un determinado nivel de protección.
- El tipo de mascarilla: los dos tipos principales de mascarillas son las «quirúrgicas» y las «respiratorias». Tienen funciones, normas y objetivos diferentes. El punto clave a tener en cuenta es que las mascarillas quirúrgicas sólo protegen contra los agentes infecciosos que pueden transmitirse a través de «gotas», mientras que las mascarillas de protección o los respiradores también protegen contra la inhalación de agentes infecciosos que pueden transmitirse por vía «aérea».
- El nivel de protección requerido: cada uno de estos tipos de máscaras está sujeto a diferentes normas y reglamentos en los distintos países. Dentro de estas normas, existen diferentes clases de dispositivos para determinar el grado de protección. Consulte la normativa de su zona geográfica.
- Desechables o reutilizables: Las mascarillas quirúrgicas sólo están disponibles como desechables. Los respiradores pueden ser reutilizables. En el caso de los respiradores, es posible sustituir el filtro una vez que está lleno.
- Duración de la eficacia: la duración de la eficacia de una mascarilla varía en función del uso. Puede ser de entre tres y ocho horas. Una máscara más barata puede suponer un periodo de uso corto. El fabricante lo indica sistemáticamente.
- Comodidad: existen diferentes tamaños de máscaras, adaptables a la morfología de la persona que la va a usar. Las máscaras de protección o los respiradores también pueden estar equipados con una válvula de exhalación para mejorar la comodidad del usuario. Algunas máscaras también cubren los ojos si se requiere protección ocular. Se denominan máscaras o respiradores faciales completos.
¿Por qué elegir una mascarilla quirúrgica?
Una mascarilla médica o quirúrgica es un dispositivo médico desechable. Protege contra los agentes infecciosos transmitidos por «gotas». Sin embargo, no protege contra los agentes infecciosos «aéreos». Por lo tanto, no evitará que el usuario se contamine potencialmente con un virus.
Una mascarilla quirúrgica hace dos cosas
Evita las gotas de saliva o secreciones del tracto respiratorio superior cuando el usuario exhala. Si la lleva el cuidador, la mascarilla quirúrgica protege al paciente y su entorno (aire, superficies, equipos, zona quirúrgica). Si la lleva un paciente contagioso, evita que éste contamine su entorno y su ambiente.
Protege al portador de la infección transmitida por «gotas» o del riesgo de salpicaduras de fluidos biológicos. En este último caso, la mascarilla quirúrgica debe tener una capa impermeable. También puede estar equipada con una visera para proteger los ojos.